Hay personas que han llegado a nuestra vida para demostrarnos que merece la pena vivirla. Es como si te regalasen unas gafas y al probártelas de repente lo ves todo más claro. Y normalmente, a veces son personas que se acercan por AFAS o mandan un correo, o llaman por teléfono y simplemente preguntan muy escuetamente y con mucha vergüenza que se quieren hacer voluntarios. Entonces es cuando pienso que las personas mágicas existen.
Todas las personas con discapacidad seguramente están pensando en alguna persona mágica en este preciso momento. Hace unos días hicimos una votación para que las personas eligieran a la persona voluntaria del año 2023 pues salió una lista de 20 personas mágicas, y es que para cada persona con discapacidad, hay una persona mágica, por todo ello podemos decir que en nuestra Asociación hay mucha magia.
Las personas voluntarias de AFAS son mágicas, porque este año se han convertido en conectores de personas, que bonito es vincularte con gente, hablar de las personas, hace que nos sintamos importantes, que bello es conocer gente nueva y gente que te aporte algo y que cuando alguien tenga un problema seguramente esos conectores voluntarios pueden saber que existe esa persona que puede ayudarte a resolver un problema. Nunca dejéis de conocer gente nueva, que no os de vergüenza, hablar con la gente y enlazaros porque puede ser útil en vuestra vida o en la vida de alguien. Las personas desconocidas nos transmiten conocimientos inéditos, experiencias nuevas, estilos innovadores, momentos únicos e irrepetibles, posiblemente si dejáis escapar el charlar, el relacionaros con esa persona que os llama la atención, hay muchas probabilidades que no la volváis a ver, así que conectaros y escuchar su historia.
Y puestos a escuchar cuentos os quiero contar una leyenda de lo que puede ser una persona mágica voluntaria, os diré que… .
“Esto le ocurrió a dos hombres que estaban en una misma habitación del hospital, separados por una cortina porque estaban muy enfermos y Juan era el hombre que estaba al lado de la pared se le permitía incorporarse una hora al día y a Pedro que era el hombre el que estaba al lado de la puerta no, y con el tiempo, las semanas, los meses, se hicieron mejores amigos y se contaban sus batallitas, su vida, su familia, sus hobbies, sus deseos, sus anhelos, sus experiencias.
Todos los días Pedro que era el hombre que estaba al lado de la puerta estaba deseando que Juan que estaba al lado de la ventana pudiera incorporarse para contarle que estaba viendo por la ventana, ya que le contaba que veía un parque enorme con patos, familias dándoles de comer, niños jugando a la cometa, enamorados que paseaban cogidos de la mano, flores de mil colores, y de esta forma crearon una relación muy bonita.
Uno de los días, el hombre que estaba al lado de la puerta se tuvo que ir a hacerse unas pruebas, y cuando volvió su compañero ya no estaba, la cortina estaba recogida y su compañero ya no estaba, entonces le pregunto a la enfermera, - “¿Dónde está mi compañero?” La enfermera lo miro fijamente y le dijo que: “- había fallecido, mientras te estabas haciendo las pruebas”.
Entonces Pedro muy triste y desolado, lo único que le pidió a la enfermera es que “quería que le cambiaran de cama porque quería ver esa ventana, que era lo que más les unía”, y cuando le cambiaron de cama y se pudo incorporar con todo su esfuerzo, se dio cuenta que no había ninguna ventana, y lo que había era una pared blanca, entonces le pregunto a la enfermera – “¿Por qué?” Y entonces la enfermera le dijo que: “nunca existió ninguna ventana, pero que aunque hubiera existido tampoco la podría haber visto porque era ciego”. Y le volvió a preguntar a la enfermera: –“¿Por qué lo hizo?” Y la enfermera le respondió que: - “porque simplemente te quería alegrar la vida.”.
Esto es lo que hacen los voluntarios de AFAS, los que son personas mágicas, y alegran la vida a 78 personas con discapacidad, apoyándoles en las cosas que más les gusta hacer porque necesitan un sustento, para salir a pasear, para acudir al cine, para jugar al golf, para admirar una exposición de arte, para compartir momentos en casa, para hacer visitas en el hospital, para viajar juntos, para pasear, para ver un atardecer, para salir una noche de fiesta, para acompañar a las personas a la peluquería, para ir al centro de estética, para ir al gimnasio, a desayunar, a merendar, a cenar, de convivencias en las cocinillas, a comer juntos, a ir a misa, a irse de vacaciones, en definitiva un apoyo puede ser cualquier persona, pero nunca como las personas mágicas de AFAS las cuales si existen y existen de verdad y estos son los VOLUNTARIOS DE AFAS.
Hoy 5 de diciembre Día Internacional del Voluntariado, la magia ha entrado por la ventana de nuestra entidad y el Ayuntamiento de Tomelloso va a premiar a nuestra asociación por el proyecto de voluntariado 2023 que se inició el pasado 25 de febrero cuando nos adherimos a la PVE (Plataforma de Voluntariado de España) firmando el acuerdo marco del programa pionero Vol+ que visibiliza todas las habilidades y destrezas que ha ido adquiriendo la persona voluntaria durante la experiencia de ayudar a otras personas.
Este programa tiene como objetivos mejorar la empleabilidad de quienes se han dedicado a cosechar los frutos de su voluntariado y aumentar el aprendizaje que las personas voluntarias.
Esta certificación se obtiene mediante un proceso que implica mucha reflexión y compromiso, tanto de la persona voluntaria como de la tutor/a que lo evalúa y lo guía. Se trata de un trabajo conjunto entre ambas partes en el que se descubren, redescubren, y se reafirman características como la resolución de problemas, las capacidades para liderar un equipo, o, tal vez, la fortaleza interior de la que ha echado mano el voluntariado tantas veces mientras daba lo mejor tendiéndole la mano a alguien más.
Por otra parte una persona voluntaria de nuestra Asociación va a ser reconocida por el Ayuntamiento de Tomelloso, este premio viene avalado por las votaciones de 72 personas que ejercieron su derecho al voto y eligieron democráticamente la persona voluntaria de este 2023 que es Adoración Mendoza Huertas, la cual con 88 años de edad es la voluntaria más veterana que tenemos en la Asociación, además es una mujer que dignifica la labor del voluntariado en Tomelloso, puesto que tiene una hoja de servicios de una índole envidiable, con más de 18 años de voluntaria en AFAS y con 15 años de voluntariado en la Asociación Española Contra el Cáncer, con más 3 años de voluntaria en ARBA, y tras 17 años en Cruz Roja, todo esto demuestra lo que supone hablar de Adoración como voluntaria.
Gracias a las personas mágicas voluntarias que hacen que con su encanto se aumente la calidad de vida de las personas con discapacidad.